Revelación o develación
Hace un tiempo a través de algunos lectores que hicieron contacto con nosotros hemos recibido comentarios, críticos quizás, acerca que en varios artículos expusimos aspectos doctrinarios que hubieran podido considerarse no conveniente su divulgación.
Sin embargo es por todos sabido que en la actualidad podemos encontrar abundante publicaciones por intermedio de Internet sobre cualquier tema que se nos ocurra e interese.-
Igual creemos conveniente aprovechar la ocasión para aclarar nuestra posición al respecto.-
Si quisiéramos ser “racionalmente objetivos”, si nos propusiéramos “difundir filosofía esotérica” podríamos expresar que, si verdaderamente fuera “esotérica” no podría ser objeto de divulgación. Porque es evidente que una vez que lo” oculto” sale a la Luz pierde su condición de serlo, por lo que estaríamos frente a una contradicción, a menos que se entienda como una expresión puramente convencional.- Es preciso advertir que cuando lo “secreto” se hace público no modifica su condición y esencia de inefable. Simplemente adquiere una apariencia externa y que en definitiva “oculto” y “manifestado” no son sino estadios de una misma Realidad. Aunque en los hechos jamás como es, simplemente se muestra en sus efectos.-
Transcribimos un conocido ejemplo:” he aquí una semilla, en su esencia está “oculto” el árbol. Más cuando éste aparece y surge de la misma en todo su esplendor florecido y fructificado, en él está nuevamente la “simiente”. De manera que nunca hubo develación de lo oculto sino revelación.-
Y si bien algunos seres han alcanzado un conjunto de conocimientos que mantienen en forma reservada o secreta y que sólo podrían ser trasmitidos dentro de ciertas condiciones (y que en cierto sentido así lo es), podemos decir que no son de todo “secreto”. Lo que podemos decir que esos pocos han arbitrado fórmulas (procedimientos) para la adecuada transmisión, por lo que se manifiesta que tampoco desean que lo sean.-
Lo que sí es necesario e importante estar sumamente “atentos y despiertos” para no confundir desenvolvimiento espiritual con ciertos estados anormales de percepción y separar el Saber y el Arte de los Iniciados de las falsedades y supersticiones que el error profano muchas veces acumulan ilusionándose con “espejos de colores”.-
Para “iluminar” es necesario adquirir Luz, pero la lámpara no puede alumbrar si ella misma no está limpia de prejuicios y errores, es necesario que esté limpia, y periódica y sistemáticamente proceder a verificar su limpieza.-
Porque alrededor de ciertas verdades, declaradamente incompletas y parciales también se han elaborado un falso esoterismo, confundiendo el simple resplandor deslumbrante de conceptos (que no son comprendidos ni experimentados) por la verdadera luz.-
No es culpa de los Iniciados que en forma reiterada hacen e hicieron lo posible para divulgar su saber ante un mundo exageradamente materialista para comprenderlo. Pero gracias a ellos que se atrevieron a hacerlo, otros pueden compartir, aunque sea en una pequeñísima porción de su luminosa ciencia.-
De ahí que surja el deber de los que han cumplido por lo menos algunas etapas del camino (que otros trazaron) el mantener expedita la senda para beneficio de aquellos que deseen recorrerlo.-
Entre el no-ser y el existir se tiende un puente de Luz. En el no-ser están las oscuras e ignotas semillas de todo lo que ha de aparecer.-
El no-ser ha sido comparado con una fuente de negras aguas y el existir viene a ser un río que de ella procede y que riega la tierra y nutre de vida todo de cuanto de ésta nace.-
A dicho manantial los cabalistas le dieron (entre otros) el nombre de “El Misterio” y en el lenguaje críptico y figurativo (simbólico) utilizado por sus adeptos dicen que “la naturaleza toda se nutre y se sostiene por el Misterio”, el cual es lo único eternamente “secreto”, no sólo en su realidad trascendente sino en su presencia inmanente en todo y por todo.-
Aunque inaccesible en sí mismo este Comienzo (como también se lo denomina) que es comparable con una fuente y al fluir de las aguas de la vida es imaginado también en los términos de Eternidad y Tiempo, y sus efectos como transcurrir surgen de esa Oscuridad que llamamos Futuro, se hacen visibles en el presente y se conservan en el recuerdo para retornar a su fuente cuando se hunde en el olvido.-
Por ello en términos absolutos lo “oculto” o “esotérico” no es sino aquello que aún no alumbró para nadie y quizás aquello que fue olvidado definitivamente por todos.-
Todo lo que alguien pueda conocer y captar ha sido extraído del seno oculto y se ha manifestado sin importar si quien lo conoce se calla o no lo hace.-
La de-velación es un proceso (o un estado de conciencia) individual, producto de la realización de un trabajo, y es incomunicable como tal. Y si se trasmite se transforma en una re-velación. Y lo que estamos realizando en este período por intermedio de esta página es intentar brindar una ayuda a cualquier candidato aspirante genuino. (aconsejamos leer el artículo sobre “Los Auxiliares”).-
El “Esoterismo” o “Ocultismo” lo podemos definirlo como una Ciencia psico-física, ya que considera la Universo como un fenómeno del entendimiento cuya única sustancia es Conciencia. Es pues la Ciencia cuya materia es la Conciencia en su doble aspecto de su única realidad: Luz y Oscuridad, siendo al mismo tiempo la disciplina cuyo terreno y herramienta es la “mente” y sus procesos. Sus técnicas proponen el despertar, extraer, canalizar, exaltar e iluminar el “entendimiento” que duerme en la materia.-
La ciencia del Alma, el esoterismo u ocultismo, es una disciplina. Y como en toda disciplina es necesario diferenciar lo que es doctrina conceptual y lo que es su aplicación práctica. No desdeñamos la ciencia abstracta, pero solamente pero solamente se convierte en fuente de beneficio para la humanidad cuando da origen a una arte aplicado.-
Materialismo a ultranza sin espiritualidad es un absurdo total pues embiste a la calidad y dignidad de la vida del hombre. Y a su vez espiritualidad sin aplicación práctica en la vida corriente se transforma en una simple intelectualidad y pude generar vanidad.-
Si bien como hemos reiterado en otras oportunidades los adeptos de las escuelas esotéricas genuinas de iniciación simbólica no son ajenos al conflicto humano y es sensible a las angustias y necesidades del hombre común, pero no se ocupa de “sentir” emociones, Sabe controlar su palabra, sus emociones y sentimientos, sus instintos. Sabe como provocar y detener en sí mismo las emociones para “poder actuar”, y sabe como contagiarlas o detenerlas en los demás.-
Ahora bien para que comience el aspirante a ser “factor” de los acontecimientos y no estar sujeto a los resultados de estos, hay que realizar en la práctica algunos sacrificios y el primero que parecería ser simple es estar dispuesto a un cambio radical de su punto de vista que alterará su posición frente a cuestiones tan fundamentales como por ejemplo el concepto de Libertad..-
Puntualmente nos referiremos a la Libertad de Pensamiento.-Vulgarmente se considera como el derecho del hombre a pensar y exponer las “propias” ideas sin censura ni limitación externa. Pero el iniciado sabe desde muy antiguo que los pre-juicios y los hábitos condicionan al hombre común y la mayoría de las veces, aunque no se consciente, toma prestados ideas y pensamientos ajenos tomándolos como suyos.-
El iniciado sabe, porque a aprendido a practicar conscientemente la Libertad de Pensamiento de una manera peculiar que consiste en pensar voluntariamente e impersonalmente, lo que conviene a la labor que se tiene entre manos no dejándose influir por prejuicios personales como la hace el profano.-
Entonces Libertad de Pensar significa para nosotros aquella que nos permite aplicar nuestras facultades intelectuales desarrolladas a voluntad siguiendo las directivas de nuestros planos trazados-
Como obreros que somos de los planos internos (y el pensamiento no deja de serlo sin ninguna duda) hemos aprendido a manejar la “materia mental” como el constructor maneja los materiales físicos.-
Por ultimo para los iniciados Libertad de Pensamiento quiere decir Poder para producir las semillas mentales que germinarán en pensamientos que serán adoptadas por otras mentes y producir la obra requerida, es nada más y nada menos que el ejercicio del manejo de las fuerzas del ánimo.-.